Letra de Sorda

Cuando me llamaste amor y no te contesté, tss... ahí pensé que entendiste algo.
Hoy me salgo de tu lengua, escapo de tus sueños, esto es una pérdida de tiempo de antemano. Fuera la ventana, mi cabeza juega. Tú ciega en tu sexy actitud, la ciudad está aun más bella. Voy de palabras con cuerpo a tu cuerpo sin palabras, me encanta cuando callas y yo hablo como Pablo.
Sin cuidado quieres mi vida a ti atada, ¿sabes? mi mirada hace malabares en los bares. Te apropias mis verdades las transformas en mentiras, te mola montarte pesadillas por el día, pesadillas infernales, repetir la misma historia, no soy tu pescadilla a la que morder la cola. Hasta donde alcanza la memoria eras tan guapa como esta canción, que me cansa antes de cantarla. Y si mi fibra vibra, mira tía, no es extraño, harto de ser majo y acabar haciendo daño.
No confundas admiración con emoción. Chica, no me escuchas, sólo hoy te doy mi voz. Puedes aprenderte la canción, no puedes entender bien el poema y no entender al corazón.
Tú que a la soledad la llamaste pasión, te vistes con lágrimas de error. Pues he pasado de esculpirte en la página a escupirte en el microfono a disculparte en la cama por un sexo tan monótono.
¿Eso es todo lo que tienes que decir?
¡Eh, eh, eh! Llámame cabrón a la cara o por teléfono, te llamo microfón ya que los dos sabemos que estoy: "un dos, un dos tres, probando". Callo tu voz de amor, ¡shh! tu odio está cantando. Odiando estar pensando que te gusta estar conmigo, mientras digo que pienses en mí si buscas frenesí. Si tu corazón busca abrigo, no pienses que este amante en adelante será mucho más que amigo. No niego el diamante escondido en tu ombligo, reniego de amarte y compartirlo contigo. Tía, el amor aparece, nunca lo persigo, por eso estas palabras son lo único que ligo.
Tienes hambre de hombres, de hombros que no den calambre. Puñaladas por la espalda y verdades por delante. Crees que todos son iguales, pero somos diferentes por eso no hay amantes que te amen como quieres.
Desesperar es esperar hacia atrás, mejor si te mueves y no es al ritmo de mi jazz. Ya estaba todo dicho antes de abrir la boca y tras tocar mis caprichos eres tú quien se equivoca.
No me adjudiques cicatrices, ni sabes lo que dices ni mereces que lo explique. Puse en tu boca triste notas de alegría, te perdiste cuando dije que mi boca es solo mia. Tía, no eres las mujeres que dejo escapar, no eres la sorprendente lágrima que llorar. No puedes ser tan especial como quieres, con suerte lo serás para otro chaval sin más.
Me da igual lo que piensen los demás, aunque puede que me llegue a importar, a veces. Y aun sabiendo que eres singular no has de olvidar que este tema es más de lo que te mereces. Chica, hasta aquí hemos llegado. ¿Tantos reproches por dos noches que he olvidado? Pero vamos, por peores prados he cabalgado, hoy estoy enamorado, tú eres parte del pasado.
Ah, ¿ahora sí te has enterado? Hoy estoy enamorado de verdad, déjame en paz.

Para no ser sorda te haces muy bien la sorda, nena.